En Resumidas Cuentas

Cuando muchos pensábamos que la emboscada contra policías en Michoacán con saldo de 13 muertos, o el tiroteo sin aclarar en Guerrero con 14 civiles abatidos por fuerzas de seguridad, y más tarde el jueves 17 de octubre en Culiacán, eran un conjunto de crímenes que llevarían al gabinete de seguridad a hacer un replanteamiento de su falta de estrategia para enfrentarlos y a reconocer errores, dolorosamente se dio otra balacera más contra mujeres y niños de la familia LeBarón en Chihuahua.